miércoles, 15 de septiembre de 2010

un escrito sin destino

Te voy a decir lo que nunca escucharás. Te voy a escribir lo que nunca leerás.
Te pido perdón. Todos los dìas, a cada hora, cada minuto pienso lo que hice. La boludez más grande de mi vida. Ruego a Dios que no te haya causado más problemas. Nunca fue mi intención hacerte mal. Si me querés golpear, cachetear, escupir, insultar, patear, hacelo, no me voy a resistir. Desde ese dia ya no vivo, sabes? Ya nada me importa.